México 12 diciembre._ La tinta viva de impresión 3D ha sido desarrollada por investigadores de Harvard. La ingeniería de materiales y la biología son campos de estudio que está viviendo una época de efervescencia. Ello, gracias a nuevas tecnologías como la impresión 3D.
Así, se crean órganos humanos o materiales vivos capaces de regular su propio crecimiento. Un equipo de investigadores de la Universidad de Harvard y el Hospital Brigham and Women ha desarrollado un tipo de tinta o hidrogel cargado con microbios para crear estructuras de materiales vivos. Aseguran que los productos impresos en 3D con ese material pueden liberar fármacos o eliminar contaminantes químicos de su entorno.
El artículo científico con los resultados ha sido publicado en la revista Nature Communications. En él los investigadores explican el proceso desarrollado durante varios años hasta conseguir demostrar la eficacia de este nuevo material de impresión 3D. A lo largo del proceso se han encontrado con retos importantes como conseguir que el material vivo se comportará ante su entorno de forma adecuada, pero también que sus propiedades permitieran usarlo en una impresora 3D para darle forma.
Tintas biológicas
Los investigadores comenzaron por el segundo de estos retos, las tintas biológicas deben cumplir con dos requisitos para que puedan usarse en una impresora 3D. Primero es necesario contar con una viscosidad suficientemente baja para facilitar la extrusión, pero a su vez requieren que esa viscosidad sea alta para conservar su forma tras la impresión.
Con esto en mente, se recurrió a incorporar en la tinta la bacteria Escherichia coli (también conocida como E.coli) y nanofibras. La E.coli es una bacteria que forma parte de la microbiota del tracto gastrointestinal de animales como los pingüinos y el ser humano.
Para conseguir la viscosidad adecuada, los investigadores se inspiraron en la fibrina, una proteína involucrada en la formación de coágulos sanguíneos. Después de demostrar que el rendimiento de impresión de la tinta microbiana era positivo, los científicos introdujeron los microbios genéticamente modificados en el hidrogel para producir las estructuras vivientes con la impresora 3D.