Más de 20 líderes mundiales y agencias globales pidieron en un comentario publicado el martes un tratado internacional de preparación para una pandemia que, según dicen, protegerá a las generaciones futuras a raíz del COVID-19.
Pero había pocos detalles para explicar cómo un acuerdo de este tipo podría realmente obligar a los países a actuar de manera más cooperativa.
Líderes mundiales proponen «un compromiso colectivo renovado»
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, y líderes como el primer ministro Boris Johnson de Gran Bretaña, el primer ministro Mario Draghi de Italia y el presidente Paul Kagame de Ruanda propusieron «un compromiso colectivo renovado» para reforzar los sistemas de preparación y respuesta aprovechando la constitución de la agencia de salud de la ONU.
«El mundo no puede darse el lujo de esperar hasta que termine la pandemia para comenzar a planificar la próxima», dijo Tedros durante una conferencia de prensa. Dijo que el tratado proporcionará «un marco para la cooperación y la solidaridad internacional» y abordará cuestiones como los sistemas de vigilancia y responder a los brotes.
Ya existen regulaciones internacionales que rigen la salud y las implementa la OMS, y los países pueden ignorarlas con pocas consecuencias. A pesar de la obligación de las naciones de compartir rápidamente datos y materiales epidémicos críticos con la OMS, por ejemplo, China se negó a hacerlo cuando estalló el coronavirus por primera vez.
Y sin poderes para hacer cumplir la ley, los funcionarios de la OMS tenían pocos medios para obligarlos a compartir detalles, encontró una investigación de AP el año pasado.
Steven Solomon, el principal oficial legal de la OMS, dijo que el tratado pandémico propuesto debería ser ratificado por los legisladores de los países participantes.
Por último, Tedros suplicó a los países ricos la semana pasada que donaran inmediatamente 10 millones de vacunas COVID-19 para que las campañas de inmunización pudieran comenzar en todos los países dentro de los primeros 100 días del año.