Hasta el punto de que los familiares y amigos de Steve Lamy, presentes en la sala de audiencia de la investigación preliminar de René Kègle, no pudieron contener las lágrimas durante el testimonio de una presunta cómplice, Noémie Morin. Su dolor y rabia hacia el sospechoso era evidente.
La joven, que debe enfrentarse a cargos de asesinato, secuestro y extorsión por complicidad, pareció estar angustiada durante su testimonio, que requirió la suspensión de las audiencias durante unos minutos. Sin embargo, con una bola de estrés en las manos, pudo responder a las preguntas de la abogada de la Corona, Benoît Larouche, durante gran parte del día, a pesar de su nerviosismo, aunque tuvo que ser llamada al orden varias veces porque no hablaba lo suficientemente fuerte.
Durante su testimonio, podríamos haber oído una mosca volando en la sala del tribunal. Sabemos que tras su comparecencia el 28 de febrero, pudo recuperar su libertad mientras duró el proceso judicial contra ella. Entre otras cosas, tuvo que completar una terapia en la Maison Carignan, que se hizo.
En el banquillo de los acusados, René Kègle no mostró ninguna emoción como de costumbre, simplemente mirando al vacío o escuchando atentamente a la mujer de 25 años.
Tendrá que volver al tribunal el miércoles para ser interrogada por la abogada defensora Annie-Sophie Bédard.
Es importante señalar que esta investigación preliminar está sujeta a una prohibición de publicación. Por lo tanto, en esta fase del procedimiento nos resulta imposible revelar el contenido de todos los testimonios a fin de proteger las pruebas para un futuro juicio ante un jurado.
Ese mismo día, Daniel Fortin, técnico forense de identificación de la Sûreté du Québec, también testificó sobre el trabajo que realizó en el marco de esta investigación.
Cabe recordar que René Kègle está acusado del asesinato premeditado de Steve Lamy. El cuerpo del contratista fue encontrado dos días después de su desaparición en un vehículo incendiado en Bradley Road al mismo tiempo que el de Jean-Christophe Gilbert.