En 2024 se registraron 93 microsismos, igualando la cifra alcanzada en 2023. Ambos años superan con creces los registros anteriores: 26 en 2022, 14 en 2021, 16 en 2020, 42 en 2019, 23 en 2018 y 25 en 2017. Así lo informó Arturo Iglesias Mendoza, jefe del Servicio Sismológico Nacional (SSN), al destacar el notable incremento en la actividad sísmica en los últimos dos años.
Relató que estas cifras de 2023 y 2024 se deben a dos factores principales:
Secuencias o enjambres sísmicos. Los microsismos suelen presentarse agrupados en un espacio y tiempo limitados.
Mejor instrumentación sísmica. Gracias al trabajo del SSN, con el apoyo de diversas instituciones y el gobierno de la Ciudad de México (CdMx), la capacidad para detectar y registrar estos eventos ha mejorado considerablemente.
¿Qué son estas sacudidas de la tierra?
El también investigador del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México explicó que un microsismo es un sismo de magnitud pequeña.
“No hay diferencias en cuanto a su génesis con aquéllos de mayor magnitud. El término ‘microsismo’ es más bien coloquial y hace referencia a su tamaño reducido en cuestión de magnitud. Sin embargo, esto no significa que la sacudida provocada no pueda ser intensa, ya que cuando éstos ocurren muy cerca, la intensidad puede ser considerable”.
No obstante, precisó, el término “microsismo” se utiliza en referencia a la magnitud, no a la intensidad. Técnicamente son eventos de baja magnitud, lo que excluye temblores de magnitud 6 o 7 de esta categoría.
Frecuencia y localización de los pequeños sismos
Al analizar por qué los microsismos se han vuelto tan frecuentes en Ciudad de México, Iglesias Mendoza señaló que la capital se encuentra en el Eje Volcánico Transmexicano, una provincia geológica-tectónica donde se ubican varios volcanes.
“En esta zona existe un sistema de esfuerzos extensivos que origina fallas. Muchas de éstas producen sismicidad pequeña, aunque en algunos episodios pueden generar sismos de magnitudes mayores”, detalló.
El doctor en sismología recordó que en 2019 también hubo una secuencia productiva de sismos en la alcaldía Miguel Hidalgo, aunque estos eventos ocurrieron más al noroeste, en comparación con los recientes de 2024. Actualmente, la actividad se ha concentrado sobre todo en el límite entre las alcaldías Álvaro Obregón y Benito Juárez. Otros temblores se han registrado en demarcaciones como Miguel Hidalgo y, en menor medida, Magdalena Contreras.
“Es importante mencionar que los sismos locales no ocurren únicamente en la zona poniente de la ciudad. Por ejemplo, en Iztacalco suelen registrarse con cierta frecuencia, al igual que en Azcapotzalco. En el sur del Valle de México también se presentan, especialmente en áreas como Milpa Alta y Tláhuac”, agregó.
En cuanto a su origen, el jefe del SSN indicó que estos microsismos están asociados a un sistema conocido de fallas, aunque no se ha estudiado con detalle. “Estas fallas son semiparalelas y se originan en la Sierra de las Cruces, cerca de La Marquesa, extendiéndose hacia el Valle de México. Algunas de ellas forman barrancas como Tarango, Las Águilas y Barranca del Muerto”.