Ciudad de México 22 de agosto._ Poco a poco Talibán toma control de Afganistán.
Los afganos están despertando a una nueva normalidad sin saber qué es normal.
A medida que el Talibán ha tomado el control de Afganistán, la gente comienza a ocupar nuevamente las calles, temerosos, con la incertidumbre de qué puede pasar bajo el nuevo régimen.
En especial las mujeres viven la zozobra. Bajo la sharía, la ley islámica, hay duras consecuencias por cosas tan simples como dejarse ver en público con la cabeza descubierta.
NUEVA VIDA
La gente finge una normalidad en la calle, dice Nasim Javid (no es su nombre real), un afgano de Mazar-i-Sharif, una de las principales ciudades comerciales de Afganistán.
Los milicianos, fuertemente armados, están tratando de hablar con los líderes comunitarios para tranquilizar a la gente.
Pero «el miedo se puede sentir en todas partes», dice Javid.
Zozobra
Secunder Kermani, corresponsal de la BBC en Afganistán, dice que más allá del aeropuerto de Kabul -en donde hay un «caos absoluto» por las evacuaciones de extranjeros- las cosas parecen estar más tranquilas.
Los negocios han comenzado a reabrir, lo que da cierto aire de normalidad a los afganos de la capital.
«Hay más tráfico en las calles y más gente, aunque no como suele haber normalmente. En particular, hay menos mujeres. He visto algunas que no necesariamente visten la burka que las cubre completamente», relata.
Pero la vida es de vez en cuando interrumpida por el constante patrullaje de hombres fuertemente armados del Talibán, quienes dicen que están ahí para «evitar saqueos y disturbios».
«Lo que se teme es que en los días y meses siguientes el Talibán imponga restricciones más estrictas a las mujeres», explica Kermani.
Las estaciones de televisión locales han dejado de transmitir música o películas. El Talibán toma Afganistán.
Con información de BBC